Las Historias también se cantan

Aly era una princesita
de pies descalzos sonrisa al sol,
Juan era un aprendiz
de una ciencia quien sabe Dios,

Para cada uno fue su primera vez
Y encuentro tras encuentro
fue lo que permito

que naciera entre ambos

esa palabra llamada amor

Mas el tiempo pasó
y algo los alejo
Juan desquitaba su rabia,
su resentimiento social
se convirtió en un ermitaño
miren quien lo iba a pensar
quien lo iba a pensar

Cuatro de noviembre,
cuatro años ya
y a su perta tocaba
zapatitos de cristal
fue un reencuentro muy feliz
casi muy feliz
aún quedaba entre ambos
eso amor, si se le puede llamar


Para terminar una historia
Solo hay que decir adiós!
Para terminar esta…
Solo sabe Dios
Solo sabe Dios.